Por Valentina Pucci y Pablo Toblli|

Obra plástica, por Virginia Serrano|

El comisario ladino/ que oficia de diligente,/ lo hace confesar a palos/ al preso y a sus parientes

Chacarera del expediente, Gustavo “Cuchi” Leguizamón

La razón por la que nos hemos instruido, aunque sea para amoldarnos a una cierta academia del pensamiento, no la conocemos del todo. La academia que sí reconocemos que no nos representa es la de la burocracia sin gracia, aquella que fabula procedimientos para impostar una seriedad, una “formalidad”. Ese papel que, añejo, nadie quiere luego, es algo que se tiene en un papel o que se tiene adentro, ¿en el marote? Gran pregunta, humildad aparte.

Cuando la chacarera antes citada expresa que hemos pensado inmediatamente, o se nos vino a la cabeza -no el vino, ojalá- sino también cambiar el segundo verso por “porque se queda sin clientes”, como si el comisario necesitara de ladrones para hacer valer su trabajo, que de hecho es así, con lo cual cambiamos la ecuación y, en vez de “combatir el crimen” (idea muy detectivesca y hollywoodense quizás), la enunciación lo hace ser voz activa y creadora de la criminalidad. Así, nos vemos atados a la burocracia de maneras más imperceptibles. En este sentido, entrar en la discusión antes planteada implicaría pensar en otros discursos de sujeción, la dimensión de lo real-actual, es decir de la cuarentena y el debate por la “libertad” (¿es tal ese debate?).

Es fuerte esta chacarera. Un poco como hablamos, desde el enojo o la bronca. Explicar escamoteados por qué o cómo. 

La pandemia trajo sus propios desparpajos, entre otros, el de la virtualidad que reordena las fronteras del ser-hacer, tiene sus límites y no puede nunca ser absoluta, porque la realidad continúa en su riel analógico, insuperable, dado que somos seres de la discontinuidad y del contacto. Por eso, siempre habrá algo no colmado en tanto seres estrictamente virtuales y seriados, en el magma anónimo de las nuevas formas de leer en las redes sociales. Sin embargo, nosotros somos una revista virtual, que intenta desde el soporte digital, recuperar un tiempo de lectura ligado al mundo analógico, el cual remite a una temporalidad no anestesiada. ¡Ojo!, no queremos volver al tiempo-carreta, sino preservar cierta nobleza de la revista clásica. Por lo tanto, entre otras cosas, nos esmeramos en entregarle al lector un conjunto de notas que recuerden el hojear en la revista de papel, en una miríada generosa de artículos que investigan, revalorizan y celebran la cultura del NOA. Así, como en un afable sillón, la distancia entre el lector y su texto se acorta, todo se siente más cercano.

Queremos que sea una revista que teja redes e intercambios entre lectores reales y no desperdigados entre el vértigo caótico de la red virtual. Somos libreros, tejedores de textos, de redes de sentidos y de relaciones. 

Novedad editorial: Trilogía, de Eduardo Perrone (Editorial La Papa, 2021). Reservá tu ejemplar en lapaparevista@gmail.com

Sumario de junio 2021

Letras en teatro: Nuevas salas, viejos fantasmas, por Samuel Cortéz.

Comentario de libros: Mariquita, por Gabriela Olivé.

Historia: Historia de la poesía contemporánea de Tucumán: Ajenos al vecindario, por Pablo Toblli.

Comentario de libros: La tentación de Eurídice. Sobre Tu fuerza primitiva, de Mario Flores, por Maira Rivainera.

Cuentos: Recuerdo de Catamarca, por Gustavo Urch. Selección a cargo de Marcelo Martino.

Comentario de libros: Poética del alquiler, de Marcelo Martino, por Facundo Iñiguez.

La Solapa: Estrellita mía: Entrevista a la cordobesa Camila Sosa Villalda, actriz, dramaturga y estrella de la literatura argentina actual, por Diego Puig.

Microrrelatos: Hombres al borde de un ataque de nervios. Selección a cargo de Mónica Cazón.

Comentario de libros: Las áreas de Brodmann o las desmigajas de la memoria, por Pablo Toblli.

Letras en danza: Contagios corporales, por Ana Teitelbaum.

Comentario de libros: Edgardo H. Berg, de Fabián Soberón o el acertijo perturbador, por Adrián Ferrero.

Entrevistas: “Una acción moviliza mi escritura”. Entrevista a Martín Goitea, por Pablo Toblli.

Había una vez: Historia de burbujas, por Ana García Guerrero.

Entrevistas: “Los libros como armas de instrucción masiva”. Entrevista a Reynaldo Castro, por Cecilia Rocabado.

Ilustraciones: Bajada de línea, por Maximiliano Torres.

Comentario de libros: Poco ruido, Muchas nueces, nutridos relatos de Adrián Llovera, artista tucumano, por Teresa Gerez.

Entrevistas: “Cuando encuentro la dirección como forma de expresión, todo comienza a fluir”. Entrevista a María José Stefani, por Pablo Toblli

Comentario de libros: Un libro de fantasmas. Una lectura de El cauce y la costumbre, de Guillermo Siles, por Gabriel Gómez Saavedra.

Comentario de libros: Reseña del libro de cuentos Los paisajes interiores, de Martín Goitea: Propiedad y comunidad para una literatura jujeña del siglo XXI, por Diego Puig.

Entrevistas: En la suave luz de la mañana. Entrevista a Elvira Orpheé, por Fabián Soberón.

Comentario de libros: Mundo Ñaupa, por Lucas Cosci

Comentario de libros: Bemoles de lecturas, amores, sueños, escritores o escribidores: apuntes sobre Cuaderno de Penélope, de Liliana Massara (La Aguja de Buffon Ediciones), por Pablo Campos.

Imagen de portada: Retrato en papa, obra plástica de Virginia Serrano.

Pablo Toblli

Es Licenciado en Letras por la UNT. Publicó los libros de poemas Nace en lo próximo (Ediciones Magna, 2015), Lucero de ruinas (Ediciones Último Reino, 2017) y el libro de ensayo Una lectura del imaginario poético de Tucumán (2000-2020) (Fundación Artes Tucumán, 2022). Es editor de La Papa Revista y Rombos Cultura. Escribe en Indie Hoy. Nació en Tucumán, en 1987. Su e-mail es pablotoblli@gmail.com, por cualquier contacto.

Valentina Pucci

Nací en 1991 en San Miguel de Tucumán. Desde entonces resido aquí. Licenciada en Letras por la UNT en 2020, con una tesina en la que investigué la poesía del escritor tucumano Juan José Hernández. Practico danza contemporánea desde niña (lo que no es un secreto, aunque no lo digo a menudo). Y también practico la resistencia feminista y de izquierda; soy de esas chicas que bregan por un «mundo donde quepan muchos mundos», como promueven los zapatistas.