Por Pablo Campos |
Esta antología es una celebración editorial. Gran acierto la iniciativa de escribir tomando La Papa como Tema Libre, libertad que limitada a ese objeto vegetal puede adquirir, y adquiere aquí, formas y colores múltiples. Contagiado de esa libertad, me detuve a pensar una palabra, una sola, que me remitiera a ese concepto/tubérculo. Experiencia fue la palabra elegida.
Sea cual fuera La Papa, o más bien Las Papas de las que habla este libro, sepan los lectores que ellas traen, adherida a su piel, una variedad de experiencias impresas -literatura mediante- en la memoria de lxs autorxs. Aparecen así, entre otras muchas imágenes, la electricidad tenue y lúdica de la papa, su contundencia poética y subterránea, su belleza vegetal y amorosa en el borde de una ventana de edificio, sus aromas estallando en la cocina de un hospital, su cáscara cayendo, entera y enrulada, de las manos de una abuela.
Los textos incluidos atrapan y gratifican la atención. He percibido un plus de disfrute personal en los siguientes títulos: La empapada (Tito Lizárraga), La pequeña saga de Papa Negra (Guillo Monti), Yo canto a la papa eléctrica (Máximo Chehin), Un remedio local para el tirapostismo (Silvina Cena), Soliloquios de la papa (Gabriel Gómez Saavedra), Óxido (Martín Aguirrez). Abre el libro un prólogo escrito desde el conocimiento de la materia, y lo cierra un epílogo tan sesudo como amable, ambos a cargo de Verónica Juliano.
Imagen: collage de Emilia Gutiérrez

Estudiante moroso de la carrera de filosofía en la UNT. Integra el Dpto. de Artes Visuales y Literatura de la Dirección de Cultura de la Municipalidad de S. M. de Tucumán.
Pablo:
Es un merito despertar el interes por leer esta Antlogia(,desde un comentario , como suscitó en mí el tuyo.
Y que esa mágica palabra, Experiencia, sea tu travesía literaria.