Por Mónica Cazón |
- ¿Cuándo se encontró con la poesía y de qué manera?
Muy temprano, a los 11 años mi padre, dueño de la imprenta Casanova & Cossio, editó un libro de mis primeros poemas titulado precisamente “En mis 11 años”. Luego, en mi juventud fui periodista corresponsal de diarios de Buenos Aires y me mantuve ligada a la escritura mucho tiempo. Pero la fugacidad de la prensa me hizo pensar en escribir algo más atemporal y comencé a escribir poesía nuevamente. Esto me satisfizo más.
- ¿Posee disparadores a la hora de escribir?
No. Simplemente escribo lo que viene a la cabeza o al corazón.
- ¿Conecta con alguna corriente estética de la poesía, en particular?
Si, con el surrealismo.
– ¿Existe la
literatura comprometida? Y en todo caso, con quién es ese compromiso.
No creo. A mí me gusta escribir ex-nihilo, hermética.
- ¿Cuáles son sus escritores de consulta?
Alejandra Pizarnik, Amelia Biagioni, Olga Orozco, Horacio Molina y Julio Salgado.
- ¿Cuántos libros editó y cómo definiría su poesía?
Edité 3 libros y definiría mi poesía como hermética.
- ¿Qué opina del crecimiento del género, en cuanto a calidad y cantidad?
Hay muy buenos poetas en la Argentina, sobre todo los del interior, como Teuco Castilla y Leonardo Martínez.
- ¿Cuál proyecto literario imagina concretar en el futuro?
Actualmente estoy trabajando en mi cuarto libro, que espero sea editado pronto. El mismo se titula “El Señuelo”.
¡Muchas gracias, querida poeta!
POEMAS DE ANA MARÍA COSSIO
Poema libre
La libertad
era eso
no responder por el nombre
Orificios de la conciencia
No tengo
consuelo
Apuna la belleza
Si las
hormigas sigilosas
cavan orificios
en la conciencia
Y en manos oscuras y filosas
mecen el sol
dormiré interrogada
Ella siente
Se ha
vaciado en la hendija
el aullido de una garza
Ella siente claro
Los sauces se escurren
en un aljibe polvoriento
En cada dedo un cerro
desdibuja la ciudad
Ella siente claro
hay pánico en el concierto
La mujer aroma el rostro
y pone candelas en la sombra
Ella siente claro
la tierra ha perdido
un destino en el sombrero
a Dolores Cossio
Figura
En la figura
concéntrica
de una madre
se prepara un precipicio
Los límites despejan
infinitas visiones del horizonte
Una mujer grita
más allá de su cuerpo
De la espuma nacen los niños
Constelación
Rompen las
estrellas
el pescuezo del ganso
contra sus mulas los ancestros
Los escudos arrancan
el grito del desentrañamiento
Gime (temible) una quena
y envuelve la constelación
a Leonardo Martínez
(El Desvelo, 2000, Ediciones Último Reino)
El Silbido de Luz
“He aquí el
infierno de la belleza”
Enrique Molina
Tinieblas no
son ciertas
sin una mano y sus nervios
Inunda el silbido de luz mi cuerpo
Hemos atravesado el túnel
para saquear un poco el solsticio
para arrancar el fulgor del lince
La figura que extrae el ojo
Sólo si la pica arremete la roca
se desprende el mineral
Brillante anillo en un dedo
que restaura el sortilegio natal
¿La luz se regala a las cosas que irradian?
¿Habrá luz u ojos que quieran ver?
Somos solo la lámina del deseo
enorme y miserable condición
lejos del cuerpo
¿Y qué de la vida sin osamenta y sin pelos?
En esta espera del rayo que fulmine
las muecas de las caretas
En el coraje de ver el vuelo de un pájaro
Incorruptible intacto reguero en el cielo
La belleza nos convoca y saltamos
la escollera en su encuentro
Podremos jamar si tú eres lo recóndito
La Letanía de los Insectos
Trémulo
aquel canto
de la cigarra empecinada
en la nota de los trinos azules
He soñado con un amigo
que dice fuerte su lejanía
Esa música de armonios provincianos
La letanía de los insectos
llenaba la noche de la princesa
dormida en un libro azul
Así me ha encontrado el trino
de luz estoy famélica
Añorada en los cantos de los grillos
En la montaña encontrare el escarabajo
azul del sueño azul del canto azul
Yo la extraña que recoge frutillas
en las laderas del camino
Que busca también el llano
desde la galería sur
avizorando un ingenio al sur
Incorpora este mensaje mi llanto
Hada que proteges con tu falda
Rubia la cabellera savia
Que discurre entre las venas
Incorpora este llanto y esta pena
para que limpie el sol los días
Yo desdentada de la risa que ríe
las manos llenas de miel del regazo
Encuentro en el hado un manto dulce
vida en las reminiscencias de una flor
a Dolores Etchecopar
(Bajo otro cielo, 2002, Ediciones Último Reino)
Renacimiento
Los lapachos
en primavera
extinguen su intento
Del encaje efímero renace
Una envoltura luminosa
Delfina
Las abuelas
untan telares
De terrones atávicos
El eco del cerro
Aletea su nombre
(Despacio, 2005, Ediciones Último Reino)
Extremo Pasaje
Lento
extremo
Lacerado por el eclipse
Y la obertura del silencio
Zumba el chisporroteo
Hay un arbitraje en el cielo
Acechan los brujos
que orbitan lo cotidiano
La segunda explosión
recupera el instinto
Patriarcal es tu voz
Enrevesado es el exilio
y trasciende la doble espuma
que reintegra la cosa
Vendrás en la barca del milenio
A recuperar lo estatuido
He ahí un caballero
En su violencia perfecta
Que captura el magma
He ahí un Dios en la superficie
Entrecortado por el prestigio
La palabra en exceso ha enlodado
El extremo del paisaje
En la treta de repechar
¿Habrá vanidad en el lenguaje?
Se sortea el rigor del poeta
Prevaricato en el extremo
Del origen impreciso
La
repetición recupera
Danos Señor la fuerza del estrago
En este ombligo salvaje
La interjección es otro ritmo
Del extremo pasaje
(Inédito)
Ana María Cossio, nació en San Miguel de Tucumán (Tucumán, Argentina) en 1955. Es Licenciada en Historia de la Universidad Nacional de Tucumán y Master en Comunicación e Industrias Audiovisuales en el Espacio Iberoamericano, de la Universidad Internacional de Andalucía, España, Sede La Rábida. Es periodista acreditada, corresponsal y asesora de prensa. Desde el 2003 realiza el Doctorado en Ciencias Sociales, Orientación Historia, de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán.
Participó en diversas antologías de poesía y publicaciones culturales. En 2000 publicó su primer libro de poesía “El Desvelo” y en el 2002 “Bajo Otro Cielo”, ambos en la editorial “Ultimo Reino”. En el 2005 ha editado su tercer libro “Despacio”, también en la editorial Ultimo Reino. Su obra ha sido comentada en Suplementos Literarios de distintos diarios del país como “La Gaceta” de Tucumán y “El Pregón” de Jujuy y en revistas literarias especializadas como “Museo Salvaje”, La Pampa; “Aquí y allá”, Capital Federal; “Generación Abierta”, Capital Federal, y otras. Integra la Antología “TUCUMÁN – Huitpoétesargentins” Livre-CD, de Pablo Urquiza, Abra Pampa Editions, París, 2006. Edición bilingüe francés – castellano que incluye a ocho poetas tucumanos con sus voces grabadas. Ha sido invitada a diversos recitales de lectura del país, entre ellos el XIV Festival Internacional de Poesía de Rosario, en octubre de 2006.

Mónica Cazón (Tucumán). Escritora, Lic. en Ciencias de la Educación y Especialista en Literatura Infantil/Juvenil. Se desempeña en la UNT en Educación No Formal. Docente en PLAT. Coordina la Asociación Literaria Lagmanovich. Fundó el CIDELIJ Tuc (Centro de Investigación, Estudio y Lectura de la Literatura infantil/juvenil -Ente Cultural-UNT- y el Laboratorio de lectura crítica e investigación “MicroLee”. Gestora cultural. Colabora en La Gaceta Literaria y otros. Lleva editos 12 libros de diferentes géneros.
Leo este breve reportaje y los poemas que lo suceden cuando ya se ha editado «El señuelo». cuarto libro de poemas de Ana María Cossio, que tengo en mi poder. ¡Excelente!
Conseguí «El desvelo» de casualidad en una tienda de libros usados de acá de Mendoza, y me gustó bastante, me gustaría saber más de ella.