Por Luis Ezequiel Campos |
Hablar sobre fanzines nos podría llevar toda la vida. Su universo abarca desde publicaciones de ciencia ficción de la década de 1930 hasta los zines feministas o de comics de nuestros días (sí, físicos y digitales también). Como eso es un montón voy a tratar de enfocarme en lo que es el fanzine en mi vida, cómo me afectó y cómo creo que puede ayudar a hacer del mundo un lugar mejor.
Un fanzine (se pronuncia “fanzín”) es una publicación independiente de bajo presupuesto y corta tirada sin fines de lucro (por más que se venda) gestada y dada a luz casi exclusivamente por el entusiasmo de sus editorxs. Está hecho por “fanáticxs” de alguna cosa que desean expresar y difundir sus ideas, obras, textos, reflexiones, etc. y no tienen acceso a otros medios, o esos medios directamente no son una opción por motivos ideológicos o económicos
Y digo “fanaticxs de alguna cosa” porque los fanzines pueden ser sobre literalmente cualquier cosa que a uno se le ocurra, solo hace falta que la idea se encuentre con el editor o editora entusiasta que necesita. Si bien históricamente la mayoría aborda temáticas artísticas o políticas, abundan zines sobre ciencia, deportes, filosofía, género, batallas históricas, juegos de mesa, insectos, cocina, cómo actuar si te lleva la policía, y un etcétera que se extiende hacia los confines de la imaginación. Mientras más específico sea el fanzine mayor será su esplendor porque ese editor que nos cuenta por ejemplo cómo es ser queer punk en Buenos Aires de principios de los 2000 o el otro que se tomó el trabajo de hacer un mini manual para jugar Battletech nos están entregando algo que salió de su corazón. Con toda la emoción de un niño orgulloso que nos muestra un dibujo.
Mis primeros acercamientos a un fanzine se dieron en formatos que quizá no son los que se asocian a los mismos, pero que luego fácilmente coinciden en varios aspectos. Cuando ingresé al Instituto Técnico, entre todas las tradiciones del colegio estaba la revista El Yunque, que salía por lo menos una vez al año y traía reseñas históricas de la institución, poesía, y lo más festejado y esperado por todxs que eran las caricaturas de lxs profesorxs. También formaba parte del contenido una historieta llamada “Geropa”, nada más y nada menos que una parodia de Cazador (el irreverente comic argentino de los ‘90), pero siendo alumno del colegio. Todo este contenido era generado por y para lxs alumnxs, el diseño y la impresión la gestionaban ellxs al igual que la distribución… ¿les suena familiar?
El otro caso fue el de Trompetas Completas, que ya comenté en otra columna de este sitio. Ambas publicaciones se sustentaban por medio de publicidad o adherencias de mecenas, y veían la luz en imprentas, siendo estas las principales diferencias con las de un fanzine tradicional, además de no reconocerse en sí mismas como fanzine.
Años más tarde entré en contacto con zines punks y literarios de todo tipo debido a mis andanzas en la escena punk local. Con esto el concepto de fanzine se terminó de redondear en mi cabeza. En estas publicaciones no solo encontré entrevistas y reseñas de bandas underground, sino también artículos sobre vegetarianismo, anarquismo, plantas medicinales, feminismo, etc.. Ideas que todavía en ese momento no eran de conocimiento masivo como lo son ahora. Fotocopias, máquinas de escribir, collages y abrochadas improlijas, dibujos y demás eran parte de esta movida, que decía a gritos HAZLO TU MISMO.
¿Quiénes eran las personas detrás de estas publicaciones? Ciertamente no eran profesionales de ningún tipo. Simplemente alguien con ganas de decir algo al mundo, de compartir su conocimiento y entusiasmo, de protestar y mostrar otros mundos, utilizando como únicos recursos lo que tenían a mano. La mayoría habían aprendido a hacer un fanzine imitando a otros fanzines, y esta cadena de brotes fanzineros llega incluso hasta nuestros días. Fue exactamente así que editamos con unos amigos el mini-zine Papaya!, valiéndonos de ver como otrxs ya lo habían hecho, buscando en internet cómo diseñar, y luego distribuyéndolo entre conocidxs y desconocidxs. Al poco tiempo comencé a editar La Hoja en La Ventana, una publicación literaria con escritos propios y de amigxs, fragmentos de textos de gente que pensaba era necesario que se divulguen, letras de canciones y también una dosis de anarquismo (fragmentos de Bakunin, Barret, Kropotkin y varixs más). Luego producí ediciones caseras que están entre el libro y el fanzine: ni tan fotocopias, ni tan profesionales (aunque una hasta tuvo lomito jaja).
En este punto se puede ver como el fanzine puede ayudar a hacer del mundo un lugar mejor, y me voy a autocitar:
“De esta manera, el lector pasa a ser escritor (creo que es similar a cuando alguien escucha una banda punk y luego piensa “che, yo puedo tocar así también, al final no es tan difícil!”), y cambia su lugar de espectador por el de protagonista: deja de ser pasivo y pasa a ser activo. Pienso que esto es una buena manera de contribuir a un cambio positivo en las personas, aunque sea algo mínimo para mucha gente.”
(La Hoja en la Ventana N° 12 – 2013)
Quién tenga algo para decir, puede hacerlo mediante un fanzine. Los recursos están más que nunca al alcance de la mano, hay infinidad de tutoriales en internet, miles de diseños para inspirarse y sobre todo, muchas cosas que merecen gritarse. Es tanta la cantidad de información que fluye en internet, que seguramente un papel fotocopiado entregado en mano, con un breve intercambio de palabras, reciba más atención que un blog suelto en la red.
Sin embargo, el gran desafío del fanzine siempre ha sido poder salir de su zona de confort, es decir, romper los límites de distribución tradicionales y llegar a personas que sean ajenas a su temática o a la escena cultural a la que pertenecen. No es dificil, pero sin duda requiere de mayor esfuerzo y tiempo, algo muy precioso para lxs fanzinerxs entusiastas que no lucran con sus publicaciones. Asi que cuando les llegue una publicación que nada tiene que ver con sus vidas, tengan en cuenta que fue el resultado de mucho trabajo o simplemente una bella casualidad.
Contagiar la ética del HAZLO TU MISMO (o DIY en inglés) es un objetivo paralelo a la publicación de zines. Creo que el gran éxito de cualquier fanzine es que lo lean y esxs lectorxs, por ahí casuales, de repente tengan ganas de investigar más sobre los temas que plantea, que se sientan interpeladxs o incomodxs, o quizá algo mucho mejor: que del fondo del corazón un entusiasmo con aroma tóner los empuje a crear su propio fanzine.
[COSAS QUE PODÉS ENCONTRAR EN UN FANZINE]
#La banda favorita que nunca vas a dejar de escuchar
#El/La escritor/a favorit@ que nunca vas a dejar de leer
#El sitio web/blog que nunca vas a dejar de visitar
#Una forma de pensar/hacer que vas abrazar para siempre
#El fanzine favorito que siempre vas tratar de conseguir
#Dibujos #Cuentos #Poesía #Revisiones de discos/libros #Anécdotas de cualquier ámbito #Reflexiones sobre batallas históricas #Direcciones y/o mails para hacer nuev@s amig@s #etc #etc #etc.
[ALGUNAS RAZONES PARA LEER UN FANZINE]
#Las notas/críticas/reseñas/reflexiones no están escritas por «profesionales», sino por gente que generalmente habla desde la experiencia directa, es decir que son posiblemente mucho más útiles para vos que algo escrito en la Rolling Stone.
#La gente que edita/escribe/dibuja fanzines lo hace porque les gusta: estás apreciando un trabajo hecho por gusto, placer, amor, un trabajo hecho con LIBERTAD.
#Un fanzine es la alegría de compartir la cultura que el sistema te niega.
[COSAS QUE APRENDÉS DE UN FANZINE]
#Hazlo tu mismo – Hacelo vos mismo#
«Necesitas GANAS, hojas, lapicera, tijeras/trincheta y unas monedas para fotocopiar. Alternativas: PC, reglas, máquina de escribir.»
#Autogestión#
«Vos elegís cuando y como lo hacés en virtud de tus posibilidades. No dependes de nadie. Vos contra el mundo.»
#Libertad#
«Libertad para expresar tus ideas y sentimientos, para criticar, para admirar, para escribir lo que quieras y COMO quieras. Libertad para elegir como trabajar. Libertad para mostrarle a los hombres que la libertad existe.»
1986, nacido y engordado en San Miguel de Tucumán. Edité (a veces solo y a veces acompañado) los fanzines Papaya! (2008), La Hoja en la Ventana (2010 – presente), Pagafantas Fanzine (2015), Naranja es el color de mi corazón enfermo (2015, microzine), Algunas notas sobre imaginar personas (2017). También los libros-zine Noches de mucho viento/ Una noche de Agosto (2013, junto a Damian Espeche), Contra el muro del espacio y el tiempo (2016). Participé en la Feria del Libro Punk, la FLIA y diversos eventos contraculturales cuando pude. Malcriado con Fun People y The Smiths, toqué la guitarra en varias bandas y todavía me gusta.
Una maravilla leerte Esequiel.. Me encantó y quisiera compartir de algún modo esta actividad. Son muchos los que muerden sus ideas, y no saben como expresarlas en palabras. Te felicito. Me sentí feliz de conocerte un poco más.
Me gusto mucho!! Muy bueno…
Les dejo el un documental que hizo José Saravia con entrevistas a fanzinerxs de Tucumán y del resto del pais, y tambien un archivo de fanzines tucumanos online que él va subiendo
*Documental Una Parte – Capitulo 4 – Fanzines
https://www.youtube.com/watch?v=KMbI6KbYuY8
*Fanzines Tucumanos
http://issuu.com/fanzinestucumanos
Hice un curso de capacitación docente en el año 2017, allí conocí lo que un Fanzine, desde ese momento trabajo en el aula con este recurso tan atractivo. En algunos cursos lo uso para introducir un tema, de una manera dinámica y original, en otro curso, por ejemplo, les enseñé a mis alumnos cómo realizar un fanzine y les pedí de que hagan historietas, poesias, frases, lo que se les venga a la mente, SUS FINZINES FUERON GENIALES! (Los tengo para cuando quieran verlos) y en otro curso, les enseñé para que trabajemos para la feria de ciencias, donde esos fanzines serán los souvenirs de la muestra.
Con esta nota aprendí muchas cosas más sobre Fanzines. Felicidades!!!
Es un objeto por demás didáctico, y para todas las edades! Que bueno que hayas podido implementarlo, ojalá de ahi salgan muchxs fanzinerxs!
Soy una estudiante de Lengua y Literatura, me parece una excelente propuesta de acercamiento de obras de autores que podemos conocer .