Por Hernán Ronsino | Amanecía en el campo. Íbamos en la camioneta de Teodoro Kieffer a cazar liebres. Una película opaca, de luz, cubría el reborde de los árboles. El camino de tierra era llano, lineal. Teodoro Kieffer, con la voz gruesa de la mañana, y una cara todavía no reconciliada con la vigilia, me hablaba del caballo de Saturnino Pérez: un zaino de un pelaje hermoso, que le salvó
Hernán Ronsino
(Chivilcoy, Buenos Aires, 1975). Publicó las novelas: La descomposición (2007), Glaxo (2009), Lumbre (2013) y Cameron (2018). En 2020 recibió el Premio Anna Seghers que se entrega cada año en Berlín, a un autor latinoamericano. En 2021 el Premio Municipal de Literatura de la ciudad de Buenos Aires.