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Microteca por sus propios autores

Entrevista a los autores de Microteca, antología de microrrelatos (La Papa, 2021)

Por Mónica Cazón |

¿Qué les pareció escribir microficciones pensadas para chicos y chicas?

Ana María Mopty:

En cuanto a la manera en que seleccioné los textos o escribí, pensé que debían ser interpretados por los chicos, entonces surgió una  experiencia con mi hijo. El ángel surge como personaje después que él se resistía a darme la computadora y así surgió la frase inicial: «No le creo a mi hijo cuando dice». Y «El tesoro» parte de la realidad. En la casa había un gato enamorado de la gatita que había adoptado un gatito desnutrido. El gato le hacía regalitos como una cucaracha muerta, una araña y la gata se lo daba a su hijo para que juegue. Pero a ese le cambié el final.

María del Carmen Pilán:

Cuando escribí las microficciones para participar en Microteca me permití abrir la puerta para salir a jugar de nuevo y recordar algunos momentos y episodios de mi infancia. Fue muy placentero y motivador para mí. Muchas gracias.

Liliana Massara:

Escribir microrrelatos para niños, no solo me significó cruzarme con mi infancia, que siempre ronda la memoria, sino con la infancia de mi hijos, y entonces aparecen esos atajos que te da el corazón, y junto al cuerpo, lo pones en la escritura, con esa posibilidad de poder convertirte nuevamente, al menos, por un instante, fugaz y maravilloso en esa niña o en ese niño que fuimos.

De alguna manera he sentido entrar en una dimensión de encantamiento; una forma de eternidad que regala la escritura al relatar para los niños, algo así como que el tiempo se detiene, o vuelve a ser aquel que viene de los recuerdos y que se hace presente.

Con mi profunda nostalgia para la hermosa edad de la infancia, en la que tuve momentos felices, siempre habrá un trozo de memorias que traigan su aventura para ser contada.

Rogelio Ramos Signes:

Para mí fue muy lindo escribir microrrelatos para chicos; mejor dicho, elegir microrrelatos para chicos entre los que ya tenía escritos. Me ayudó para comprender que, de alguna manera, le estuve escribiendo sin darme cuenta, al niño que fui; poniendo en palabras lo que me hubiese gustado leer en aquellos años de escuela primaria. Insisto: fue muy lindo.

Gabriela Palazzo:

Las microhistorias que escribo surgen de momentos, de instantáneas cotidianas. Las que elegí para «Microteca» son ese acto dentro de una escena mayor, un pedacito de vida donde la potente naturaleza de los chicos se manifiesta en una reflexión vital («Con la mañana»), una certeza mágica («Barco») o un gesto de amorosa empatía («Ruedas»). Después que dejaron su huella en mí, las convierto en palabras y así busco dejar el registro de su epifanía.

Norah Scarpa Filsinger:

Escribir para chicos y chicas es para mí, de algún modo, retrotraerme a esa edad de tanta frescura de sentimientos, y de otro, poder ver con nuevos ojos las cosas de este mundo. 

Juan Pablo Saénz Gil:

Apenas empecé a escribir microficciones dirigidas al público infantil, una sonrisa se dibujó en mi rostro. Experimenté, sorpresa, alegría, soledad, diversión y nostalgia. Terminé riéndome a carcajadas conmigo mismo, desde la más genuina inocencia. Fui a lavarme la cara y vi, en el espejo, un niño que no dejaba de sonreír.

Patricio Ramos Gatti:

Hermosa y divertida experiencia la de escribir microficción para niños y adolescentes, ponerse otra vez en esa edad.

En mi caso en particular, además, como una forma de ejercicio, de juego o desafío, se suma el hecho de que los tres micros publicados en esta antología tienen solo 19 palabras cada uno, sin contar título, por supuesto. Muy agradecido de haber participado.

Paula María Cazón:

Escribir microficción pensada para chicos y chicas es encontrar el espacio de la risa, el juego y el asombro. Regresar y rescatar lo que aún no dejé, acercarme a otras identidades. Escribir microficción es pura “orfebrería”. Agradezco la convocatoria.   

Sandra Bulacio:

Para mi escribir microficciones para  niñas y niños fue una experiencia enriquecedora,  recuerdos de infancia y misterios que todo niño tiene por descubrir.

Gracias por convocarme a esta antololgia. 

Microteca llega al otro contintente de la mano de María Gracia Ceballos Paz:

¿Qué te pareció escribir microficciones pensadas para chicos y chicas?

La verdad, fue un desafío al principio jajaj porque nunca había escrito nada para chicos. Tuve que pensar bastante pero después de jugar con mi sobrina se me fueron ocurriendo un par de ideas y de ahí fueron apareciendo otras. Al final, me terminó gustando mucho porque fue una experiencia nueva. 

2-¿Cuándo viajaste y por qué motivo? 

Vine para Francia el 16 de septiembre, viaje porque me dieron una beca para venir a trabajar desde el 1 de octubre de 2021 hasta el 30 de abril de 2022 como Asistente de Lengua (español), es un programa de France Éducation International. A mí me tocó un Lycée en la ciudad de Saint-Étienne, que es parte de la académie de Lyon.

3-¿Qué sentiste al tener la posibilidad de acercar Microteca a Francia?

La verdad, muy contenta, me encanta poder traer un poco de Tucumán para acá, me siento casi como una embajadora jajajaj y es muy lindo poder compartir nuestra cultura y esta linda antología que hicimos.

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2 respuestas a “Microteca por sus propios autores”

  1. Rogelio dice:

    Gracias, Mónica, por tu trabajo.

  2. Norah Scarpa Filsinger dice:

    El libro está muy bonito y me alegra que empiece a pasearse por el mundo. Gran trabajo el tuyo, querida Mónica. Nosotros, con gusto, te acompañamos.
    Norah

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