Por Cecilia Vega |
Un reloj de arena se rompe y deja escapar el tiempo que lleva dentro, pasado y futuro se confunden en sus granos ¿esta cayendo o esta subiendo? ¿el tiempo avanza o retrocede? Atrapado en esta dialéctica, Nicolás vuelve al lugar donde nació y creció; como toda vuelta, implica reconexiones. En su caso se trata de conectar con un pasado que es al mismo tiempo individual y colectivo.
Un territorio es un proceso de apropiación de la naturaleza que cada grupo social efectúa desde su ontología. Ubicarse y actuar en determinado territorio es entrar en diálogo con todos esos factores que lo componen. Andalgalá, Catamarca, lugar de donde es oriundo el artista visual Nicolás Vega, es un territorio marcado por luchas que se extienden a través de 500 años.
Cinco siglos de tiempo se materializan en los granos de arena con los que trabaja Nicolás en su obra secular, video registro de una acción realizada entre el 2019 y el 2021, para su entrega final del Taller C de la facultad de artes. El video divide el tiempo/espacio en dos: de un lado de la pantalla la arena cae como un chorro formando un pequeño montículo, del otro lado vemos (y escuchamos) como el artista sopla ese mismo montículo hasta lograr hacerlo desaparecer en el viento. Al finalizar, las acciones cambian de lugar. El lugar elegido para realizar la acción tiene como fondo el cerro nevado de Aconquija. En primer plano una frágil montaña de arena se arma y desarma constantemente a capricho del artista y de las condiciones climáticas, de fondo el Aconquija, que resguarda los recursos necesarios para la supervivencia de los pueblos que habitan la zona, el cual está constantemente amenazo por la minería.
La arena oculta y devela simultáneamente. De un lado vemos aparecer el cerro en la línea de horizonte, mientras que del otro lo vemos esconderse; nuestra atención cambia, oscila constantemente de los granos de arena al cerro. Señalar algo implica justamente un llamado de atención, nos obliga a detenernos y observar un determinado elemento de nuestro entorno de una manera diferente a la habitual. Leyendo algunas ideas sobre la relación entre política y arte, me encuentro con una suerte de definición: “El arte consiste en crear espacios y relaciones que reconfiguren material y simbólicamente el territorio común, consiste en redistribuir las relaciones entre los cuerpos, las imágenes, los espacios y los tiempos”.
Pienso que Secular, al comparar de alguna manera el cerro Aconquija con una pequeña y frágil montaña de arena que se desarma en el viento, tensiona los discursos dominantes relacionados al lugar y la minería sustentable con la intención de posibilitar otras miradas sobre ese territorio. La realización de la pieza también estuvo marcada por estas tensiones: al día siguiente de haber terminado de grabar el video, el artista amanece con la noticia de que las máquinas habían ingresado a la zona.
La palabra secular refiere a algo que se repite cada siglo, algo cíclico, como la montaña de arena que se arma y desarma constantemente en la pantalla, develando y ocultando en un tiempo que parece romperse y no avanzar. Develando y ocultando al cerro Aconquija, que queda atrapado en un bucle donde el presente parecer ser una reactualización del pasado. ¿Y el futuro?
Link al video: https://youtu.be/j__vT-b7vg4
Nació en San Miguel de Tucumán el 24 de junio de 1994. Es Licenciada en Artes Plásticas por la Facultad de Artes de la UNT y forma parte del grupo de investigación en artes independiente Linde Contemporánea. También realizó talleres de poesía y participó de las últimas ediciones del FILT (Festival Internacional de Literatura de Tucumán).