Sobre la Suite Tucma, de Patricio Gómez Saavedra
Por Fabián Soberón |
La suite es una forma musical que tiene un origen antiguo. Bach, Haendel y grandes músicos del siglo XlX como Tchaikovski compusieron piezas insoslayables.
La suite entrelaza danzas de diverso origen y esa combinación produce una obra que suele alternar movimientos rápidos con otros lentos.
Con el transcurso del tiempo, el término pasó a denominar una reunión de piezas alternadas de origen y tempo variable cuya fuente podía ser la tradición melódica del acervo cultural de una zona geográfica determinada.
Patricio Gómez Saavedra, músico tucumano, compuso una suite llamada Tucma. En la obra, única por su origen y por el contexto en el que se difunde, el autor ha tomado canciones reconocidas del folclore tucumano y las ha convertido en parte de una pieza escrita con los códigos propios de la música de concierto. Gómez Saavedra ha trabajado con piezas de raíz popular que no tienen la masividad de músicas similares difundidas en Salta o Santiago del Estero. No deja de ser un desafío para el compositor la tarea de llevar a una tradición frondosa y con antecedentes insoslayables los retazos de una música que abreva en fuentes menos ligadas al lenguaje cifrado y estructurado.
La composición de Gómez Saavedra es muy importante ya que propone un trabajo minucioso y cuidado y crea precedente en estos tiempos en los que parece que cualquier persona toca un instrumento y difunde en redes sociales poniéndole a ese ladrido el nombre equívoco de música.
La pieza Tucma muestra una destreza en el manejo del lenguaje polifónico y un conocimiento de las fuentes folclóricas. La combinación de lo culto y lo popular no es baladí. La obra sintetiza ambas posibilidades estéticas y consigue transmitir la emoción popular en una lengua menos propensa al desvarío y la monotonía armónica.
La suite Tucma elabora una síntesis melódica a partir de varias canciones y brinda una entrada al universo sonoro de épocas diversas, casi como un aleph musical del norte argentino.
Nació en Tucumán, Argentina. Es Licenciado en Artes Plásticas y Técnico en Sonorización. Se desempeña como Profesor en Teoría y Estética del Cine y Comunicación Audiovisual en la UNT. En 2014 obtuvo la Beca Nacional de Creación otorgada por el Fondo Nacional de las Artes. Colaboraciones suyas se difunden en publicaciones nacionales e internacionales. Integra las antologías Poesía Joven del Noroeste Argentino (compilada por Santiago Sylvester, FNA, 2008), Narradores de Tucumán (compilada por Jorge Estrella, ET, 2015) y Nuestra última Navidad (compilada por Cristina Civale, Milena Caserola, 2017), así como el diccionario monográfico La cultura en el Tucumán del Bicentenario, de Roberto Espinosa (2017). Fue traducido parcialmente al portugués, al francés y al inglés. Libros publicados: la novela La conferencia de Einstein (1ª edición en 2006; 2ª edición en 2013); en el género relatos: Vidas breves (1° edición en 2007; 2° edición en 2019) y El instante (2011); en el género crónicas: Mamá. Vida breve de Soledad H. Rodríguez (2013), Ciudades escritas (2015) y Cosmópolis. Retratos de Nueva York (2017); y el volumen 30 entrevistas (2017). Como director de cine, realizó los documentales Hugo Foguet. El latido de una ausencia (2007), Ezequiel Linares (2008), Luna en llamas. Sobre la poeta Inés Aráoz (2018), Alas. Sobre el poeta Jacobo Regen (2019) y GROPPA. Un poeta en la ciudad (2020). Con los músicos Fito Soberón y Agustín Espinosa, editó el disco Pasillos azules (AERI Records, 2019).