Por Ana Teitelbaum |
“Es decir, que el cuerpo mismo de quien escribe (sobre/ de /con) danza es influido por ella. Que el conjunto de movimientos, procesos coreográficos, vistos, integrados, planteados además mediante la práctica, han terminado por tramar el lugar mismo de nuestra percepción. Que esta vasta actividad receptora del cuerpo crítico determinará en gran parte el juego más o menos controlado de sus estesias y su forma de transitar en la expresión verbal. Como la aparición de una ola sobrecargada de impresiones recibidas. Como el viaje de un cuerpo que toma tierra en las orillas de su decir. “*
Laurence Louppe (1938-2012. Francia)
*Louppe, Laurence, “Poética de la danza contemporánea”, Edic. Universidad de Salamanca (Es), 2011.
Hermosa geografía para movernos, nos ofrecen lxs geniales inventores de La Papa y sus letras, quienes, atentxs a una vacancia, me convocaron a editorializar éste espacio. Conectando con Fernand Deligny, a esta vacancia les propongo no ocupar, sino vagar en su extraordinaria riqueza, darle una traza, una existencia.
Subiremos el volumen de voces bajitas, y en una dudosa configuración entre una mezcladora de DJ, una práctica coreográfica y una construcción arquitectónica probaremos frecuencias, voces, produciremos materialidades danzantes y espacios para atravesar desde lo que la danza nos hace.
Darle letra a lo danzante y a la “danzaidad” (como dice Paz Rojo), como darle lugar a éste acto íntimo y muy poblado a la vez, entre mi pensamiento que empuja la escritura como intimando con lo voluptuoso. Dar a probar la letra a la danza, dar a probar la danza a la letra, vectorizarnos sensiblemente.
Me inclino a la escritura ablandando mi verticalidad, atendiendo a las miles de direcciones gravitatorias, direcciones desviadas que abandonan la ilusión de la única, simétrica, y perpendicular direccionalidad. Caer irguiéndome y erguirme cayendo, simultáneamente, friccionar los opuestos.
¿Procuraremos un programa de necesidades de éste espacio para vagar? Tiene que haber un espacio para los procesos creativos, un espacio de construcción de genealogías, un espacio para las prácticas, para los inventos y exploraciones, un espacio para los atravesamientos, un espacio para caer irguiéndonos y subir cayéndonos, espacios que desvíen, espacios secretos; que se puedan abrir ventanas, encontrar umbrales, y más.
¿Y si lo pensamos y habitamos juntxs?
Seguramente no agotaremos la papa con una aburrida y seca cronología de “hechos”, sino que procuraremos una exquisita y ampulosa en todas sus posibilidades visita al terreno, sus desniveles, sus vistas y orientaciones; el campo en constante fermentación de la danza contemporánea (¿o qué?, y más) en Tucumán. Y abriremos ventanas para ecualizar otras voces de otros terrenos vecinos, cercanos y lejanos.

¿Qué les pasa a nuestras prácticas con los heridos mundos? ¿Qué preguntas nos hacemos?
Configuremos juntxs este espacio, escribime a letrasendanza@gmail.com con un tema que querés que trabajemos, pensemos, investiguemos y escribamos.
Foto principal: Marcela Alonso. “mejor solos”, Club Tucumán Carne, 2005, Teatro San Martín. Creación colectiva: Marcos Acevedo, Pablo Salas, Julieta Ganum, Claudio Luna y Ana Teitelbaum.

Ana Teitelbaum nació en Tucumán en 1971. Desde el campo de la danza contemporánea desarrolla sus prácticas como bailarina, coreógrafa y docente, considerando al mismo como un espacio extenso de producción e investigación artística. Actualmente es becaria del Fondo Nacional de las Artes (2019), y obtuvo otras becas y distinciones como la selección para el Encuentro Sudamericano de danza contemporánea en Chile (2001) y la beca de la Fundación Antorchas (1998). Es arquitecta egresada de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UNT. Es docente de la Escuela de Bellas Artes de la UNT y co-gestiona el espacio de danza El Estudio junto a Beatriz Lábatte. Asiste a seminarios, talleres y workshops de artistas y maestros en Argentina y en el exterior, de danza, teatro y actualmente se encuentra cursando el posgrado en Prácticas artísticas Contemporáneas de la UNSAM. Actualmente forma parte del Colectivo de trabajadoras de las artes de Tucumán, La Lola Mora.